Elda: [00:00:00] Nos da tanto gusto de que puede estar con nosotros y compartir un poquito de lo que usted ha pasado este último año platiquemos un poquito acerca de como es que usted encontró el cáncer que acaba de suceder hace no más un año.
Blanca: Un año. Exactamente.
Elda: Cómo es que pasó todo?
Blanca: Ay, Dios mío. Pues me di cuenta, verdad de una bolita en el seno izquierdo, verdad? Que que ya tenía rato que la tenía allí. Pero usted sabe que uno como es de, pues de otros años uno le da vergüenza, platicarle, pues yo vivo con mis hijas con mi hija y mis nietos este platicarles lo que uno ve en su cuerpo. Porque pues antes era un tabú por decir verdad que uno no podía decir. Si algo veía en su cuerpo, si algo le [00:01:00] está pasando por vergüenza.
Elda: Sí.
Blanca: Entonces, pues yo no le comentaba nada a mis hijas, verdad? Hasta y menos porque en ese tiempo, pues mi niña aquí presente ya estaba pasando también por su enfermedad que aún todavía padece, verdad? Entonces, pues yo no quería. Pues, si mortificarlas ni nada de eso, porque ella estaba tratándose. Entonces, pues yo lo dejé así hasta que ya ella salió de un poco de su problema. Ya les empecé a comunicar porque yo veía que aquella bolita iban a aumento, creciendo.
Elda: Y iba creciendo.
Blanca: Entonces ya les comuniqué y y por medio de mi hija, ella se encargó de, de investigar cómo llegar hacia ustedes.
Elda: Sí.
Blanca: Ya llegando aquí. Pues ya empezaron exámenes y exámenes. Y ya este, pues se me como se nos [00:02:00] comunicó, verdad? Porque siempre anduvieron las dos conmigo. Gracias a Dios y a ellas que siempre han estado a mi lado. Se nos comunicó ese día. Pues que era cáncer. Yo ya lo presentía.
Elda: Sí.
Blanca: Yo ya lo presentía, verdad? Que que algo andaba mal, verdad? Y entonces, pues ese día ya nos citaron y vinimos y ya este. Pues yo, desde que vi al doctor que me estaba atendiendo, que pasó frente a de nosotros, me miró y se agacho. Cuando yo vi esa expresión del doctor. Yo dije esto ya vale.
Elda: Ya lo sabía.
Blanca: Ya. Esto anda mal, muy mal. Y así fue verdad? Nos entramos a su consultorio y estaba otra señorita que hablaba español y al doctor se sentó y ya nos comunicó, verdad? Yo no sé inglés, pero yo, cuando dijo [00:03:00] cáncer, yo dije, si. Eso es ya a mis hijas, pues se quebraron, verdad? Lógico y más viñeta, más niñeta.
Elda: Y su nieta también estaba allí en ese día.
Blanca: Sí, siempre and ella con nosotros ahorita porque está trabajando y ya hemos pasado muchísimo todos estos procesos, pero ella siempre ha estado a mi lado y vi nieto también. Entonces este, pues ella fue la que más se quebró. Yo quedé, pues. Yo no dije nada. Yo no me quedé silenciosa. Entonces, ya la enfermera me dijo que si había entendido lo que había dicho el doctor.
Sí, le dije sí, entendí segura. Le dije sí, tengo cáncer. Y como lo toma, le digo no, pues. Yo simplemente me me pongo en manos de Dios. Nuestro señor. Él es el que va a ser la obra. Él [00:04:00] sabe lo que de aquí en adelante, vamos a a vivir. Y él nos va a dar la fuerza para soportar todo el proceso que venga de aquí en adelante, verdad?
Elda: Y como se sintió estando ahí, sentada frente a sus hijas y su nieta. Porque usted le empezó así de plano al principio de este episodio, hablando de, como muchas veces nosotros, verdad, tratamos de ser más fuerte para los demás. A veces no decimos para no molestar a los demás. Pero en ese preciso memento le acaban de diagnosticar con cáncer, que es lo que le estaba pasando por la mente en ese memento.
Blanca: Pues, como te digo, yo quedé en, verdad? Yo dije bueno, pues que sea lo que Dios quiera. A mí, lo que más me dolió ver a mis hijas y más a mi [00:05:00] nieta. Sí, ella se quebró bastante, bastante. Yo yo no lloraba. Yo no más, decía cálmate. Mi hija tranquila no pasa nada. Si, tranquila. Todo va a pasar.
Elda: Y de ahí se salió o ustedes salieron. Y qué es lo que sucedió saliendo de aquí de esta clínica?
Blanca: No mas iban, nos pensativas tristes. Ya fue cuando yo pues empez porque a mí mucho tiempo no me caía el 20.
Elda: Como que no había calculado.
Blanca: No captaba lo que lo que me venía todavía encima. Lo que iba, estaba en puerta a pasarme. Yo no, yo no sabía nada de eso.
Elda: Cuándo fue que verdaderamente pudo captar lo que estaba sucediendo?
Blanca: Pues cuando ya empecé a ir a las quimioterapia.
Elda: Eso es cuando ya.
Blanca: Ahí es [00:06:00] donde agárrate, porque…
Elda: como se preparó para ese primer día entrando, sabiendo que iba a ir a quimoterapia como se preparó mental físicamente.
Blanca: Mental y ponerme en manos de Dios. Dije señor, aquí estoy. Que se haga tu santa voluntad y no la mía.
Elda: Sí, me imagino que ya esté estando en el tratamiento. Ah, porque usted tiene que estar sentada por un buen tiempo, verdad? Recibiendo esto.
Blanca: Una hora.
Elda: Sí.
Blanca: El tratamiento.
Elda: Con quién iba o quién la llama.
Blanca: La mayoría de las veces, mi niña es la que está aquí.
Elda: Dice niña, pero ya la niña ya está mucho más grande.
Blanca: Pero para los padres nunca dejan—
Elda: nunca dejan de ser niños. Sí. Qué precioso que pudo tener con usted, familia?
Blanca: Sí.
Elda: Ah. Hemos entrevistado otros pacientes que fueron diagnos diagnosticados durante COVID del 2020 y no alcanzaron tener familias o me da mucho gusto escuchar que usted sí tenía [00:07:00] ahí familia que iban con usted. Vamos a regresarnos un poquito a lo que es el diagnóstico. A qué etapa le diagnosticaron el cáncer?
Blanca: Pues yo me recuerdo que dijeron que era el dos cmica.
Elda: Sí, la etapa dos, etapa dos y platicando acerca de mamografías. Usted? Ah, la diagnosticaron a cuántos años?
Blanca: Pues a ese—
Elda: A la 70, verdad? 70 años.
Blanca: Sí.
Elda: A los 70 años, usted había estado viniendo a agarrar sus mamografías o no?
Blanca: No.
Elda: Y habían pasado mucho tiempo.
Blanca: Mucho tiempo, mucho tiempo.
Elda: Y desde cuándo había sentido esa bolita.
Blanca: Oh, ya tenía rato también que pero chiquita. Chiquita y así como te digo fue fue creciendo creciéndote que ya era algo que hasta se me notaba por se la con los como de seis, creo seis o siete ya de grande.
Elda: Wow. Entonces ya habían pasado buen tiempo. No estaba agarrando su [00:08:00] mamografías, que era la razón número uno que usted no había venido a agarrar sus mamografías.
Blanca: Pues, porque no, como te digo, como no, pues uno no sabe aquí a dónde dirigirse, a donde quién oriente para venir a una parte como esta verdad? Que Dios nos guió. A mi niña le puso eso en sus manos.
Elda: Le hago esa pregunta porque hay pacientes que no vienen. Por por causa de conocimiento de que hay locales, así como The Rose que ayudan a mujeres que no tengan aseguranza, cosas así. Hay otros que, por razones de cuidar a todos los demás, que me imagino que usted también lo hace cuidando a todos los demás, poniéndose a sí mismo. Por último, pero precisamente por eso es que estamos haciendo estos podcast estos episodios para educar a nuestra gente de que hay locales, así como The Rose. Como se— cómo se sintió al darse cuenta que había un local que ayudaba a mujeres [00:09:00] inseguro? Sin muchas— obviamente usted tuvo que dar pruebas. Me entiende, tuvo que calificar porque no damos mamografías gratis aquí. Tuvo que calificar, pero como se sintió al saber que había un local que que iba a poder ayudarle a usted sin seguro.
Blanca: Pues me sentí bien tranquila porque dije ya ya me van a empezar a tratar verdad? Y pidiéndole a Dios que calificara como tú lo has dicho, verdad, para todo esto.
Elda: Sí.
Blanca: Era, nos pusimos, me puse mano de Dios, que Dios y era mi hija, las partes donde ella iba a hablar con las per la pusiera frente a las personas indicadas para que todo ese proceso saliera bien y pudieran pudiera calificar para que se me diera el el tratamiento necesario.
Elda: Sí, los exámenes y a usted, cuando usted vino, hay muchos que dicen qué tipo de clínica es The Rose? Porque al escuchar que tratamos a las personas sin asegurar, a veces se imaginan que es una clínica comunitaria [00:10:00] un poquito diferente. Pero usted recibió buen tratamiento aquí.
Blanca: Oh, fabulosamente.
Elda: Que bueno.
Blanca: Muy bien, todos, todos, todos. No tengo palabras con que agradecerles todo lo que han hecho por mi.
Elda: Que bueno.
Blanca: Todos.
Elda: Mucho gusto. Hablemos un poquito acerca de su tratamiento. Ya hablamos hacer un poquito de la quimoterapia cuando cuando ya la diagnosticaron con el cáncer, hablaba, me hablaba un poco acerca de lo que era el tratamiento que luego luego la mandaron al hospital para o que qué es lo siguiente? Platíqueme un poco del tratamiento que usted recibió antes y luego a donde llevó todo el tratamiento. Empezó con quimoterapia y cuánta cuánto tiempo de quimoterapia?
Blanca: Fueron dieciseis? Si, creo dieciseis o 18 quimioterapia.
Elda: Eran bastantes.
Blanca: Ay, sí, cállate la boca. Al decir ya [00:11:00] dieciseis. Yo ya quería tirar la toalla. Yo ya estaba muy cansada.
Elda: Cansada.
Blanca: Sí. Yo ya no quería saber nada. Y dice lo comuniqué a mi nieta, que sabes que hijita. Yo ya no quiero seguir ir. Ya. Déjenme así. Ya quiero descansar. Me dice No, Abue, tú no te puedes rendir. No me puedes hacer eso. Ya vas a terminar. Te faltan dos, dos de falta. Sí decía yo sí, hija, pero no más. Yo sé cómo me siento. Y uno le sigo nada, verdad? Porque había días en que créeme que pues no me podía ni levantar de la cama. Sí. Y yo soy una persona que a mí me gusta levantarme temprano a las cinco de la mañana, hacer [00:12:00] mi café, primeramente, ponerme en manos de Dios y a mi familia. Entonces todo eso para mí era, pues, insoportable estar tirada. Yo no podía estar tirada. Sí, pero no podía tampoco. Si me ganaba todo eso, es muy fuerte. Ese tratamiento que le ponen a uno.
Elda: Y qué es lo que pasó que fueron los síntomas que usted pasó?
Blanca: Mira para empezar mucho agotamiento. Mucho cansancio. Sí, hasta mucho sueño. Sí, náuseas. Muchas náuseas, muchas náuseas. Sí, los sentidos me zumbaban que es una barbaridad. Sí. [00:13:00] Sí, feo, feo. Ya no, yo no, no sé.
Elda: Wow.
Blanca: Me zumbaban muy feo. Los sentidos. Sí, las llagas en la boca que todavía es fecha que a veces me salen. Sí, no puedes comer. Y yo con el hambre.
Elda: Con el pero el hambre no se le quitó?
Blanca: No el hambre. Sí, gracias a Dios. El hambre nunca se me quitó.
Elda: Pero era difícil.
Blanca: Era difícil. Exactamente. Las muelas se me caían a pedazos. Se me cayeron a pedazos. Sí, decía yo, cómo va a ser posible? Decía mi nieta. Ah, es que son muy fuerte. El tratamiento que se te está dando.
Elda: Sí.
Blanca: Muy fuerte.
Elda: Para combatir lo que era ese cancer.
Blanca: Exactamente. Y lo más increíble que la bola se fue bajando. Se fue bajando, se fue bajando hasta que quedó en nada.
Elda: Wow. Wow. Y yo me imagino cuando usted está pasando eso ya [00:14:00] le decía sus hijas, ya no quiero. Ya no quiero. Entonces para usted, usted pudiera decir que fueron las palabras de sus hijas que le daban el ánimo?
Blanca: Exactamente. Como te decía mi nieta me decía, Abue, no nos puedes hacer eso. Estás en lo último. Estás por terminar? Sí, yo le sí, mija. Yo lo sé, pero es que ya no puedo seguir. Si. Ah, hazlo por nosotros. Hazlo por nosotros. Y yo le decía okay, mija, voy a seguir adelante, pero no te prometo nada.
Elda: Solo hacía por ellas.
Blanca: Lo hago por ustedes y les doy gracias por todo el apoyo por todo el cariño por todo lo que han hecho por mi y por el la alegría de la casa que es mi bisnieto el iba y me decía Abue, [00:15:00] no Simone, te das cuenta? Yo al principio no sabía qué era lo que quería decir eso hasta que le dije a mi nieta. El niño vino y me dijo: Abue, no Simone. Qué es eso, mija? Qué me quiso decir? “Abue, Que no quiere que te mueras.” Ah, eso quiere decir? Decía sí, eso fue lo que me me animó más a seguir adelante. Y él estaba de cuenta al pendiente. Si él veía que yo me movía de la cama, él me decía “restroom?” Al baño y estiraba su manita.
Elda: Para ayudarle. Para cuántos años tiene
Blanca: nueve años?
Elda: Wow.
Blanca: Ahorita ya tienen nueve años.
Elda: Binieto de nueve años.
Blanca: Hijo de mi [00:16:00] nieta, que es hija de mi hija.
Elda: Y cuidándola, cuidando, mirándola.
Blanca: Ajá.
Elda: Entonces yo lo a lo que me quiero referir y lo que yo quisiera comunicar es que la familia súper importante.
Blanca: Exactamente.
Elda: Durante un tratamiento así.
Blanca: Así es.
Elda: Para una mujer a su edad que necesita ese soporte.
Blanca: Yo lo tuve todo. Gloria, Dios. Sí, todos lo tuve. Mi hijo, que es el mayor que ella está en México, está en Monterrey. Él cuando podía. Pues venía. Tú sabes bien, que cuando está uno lejos, no es por justificarlo tampoco, pero a veces no se puede. Desgraciadamente, pero telefónicamente siempre ha estado. Sí, siempre ha estado presente, pero mi bisnieto no, cállate. Me agarraba la mano para ir al baño y me decía aquí voy a estar.
Okey aquí voy a estar no, no, [00:17:00] seguro, no, no. Aquí yo, aquí.
Elda: Que dice no le ponga segura a la parte.
Blanca: No le pongas.
Elda: Mire.
Blanca: No le ponga seguro.
Elda: Y lo hace uno por ellos, verdad? Que precioso.
Blanca: Que exactamente. Y yo estoy aquí por ellos y por Dios, padre. Sí, sí, que es el que ha hecho la obra en mí.
Elda: Sí, porque el cáncer es, es algo que uno tiene que pelear. Y uno pensando mientras que está plas pasando lo que a uno pasa, eh que no la va a hacer. Pero mire, como usted ya sobresalido ya está a un año del diagnóstico.
Blanca: Exacto. A mi edad, tal vez sea difícil vencerlo, pero como tú lo has dicho, la familia es el soporte para poder seguir adelante. Es la que te da la fuerza necesaria.
Elda: Sí.
Blanca: Sí. Y lo más duro, cuando me. Pues, cuando me operaron también.
Elda: Platíqueme un poquito acerca de eso porque usted no solamente recibió quimoterapia, sino que le hicieron [00:18:00] cirugía platíqueme un poquito esa cirugía. Tengo aquí en mis notas, que fue una doble mastectomía que ya a su edad también después de pasar quimoterapia y todo ahora surgi surgió osea tener la cirugía. Platíqueme, que es lo que le cruzó por la mente en preparación también para esto.
Blanca: Pues, prácticamente lo mismo, ponerme en manos de Dios. Sí. Y mis hijos ahí estuvieron dos. Tuvieron presentes mi hijo de México. No podía llegar ese día hasta otro día, pero estuvieron mi nietos, mi yerno ahí estuvieron presentes. Nos pudimos despedir, darles la bendición, verdad? Este y lo que más me puede me pudo y todavía me puede, es que mi nieta, como nos dijeron que no podían entrar nadie en más que una persona.
Mi nieta fue la que se encargó de entrar conmigo, [00:19:00] verdad? Y a todos les di la bendición menos a ella.
Elda: Oh! Se le olvidó?
Blanca: Se me olvidó porque ella iba conmigo. Sí. Entonces cuando nos llamaron para para adentro, ya. Pues, yo no creí que ya iba directo a que me iban ya a preparar y todo, verdad? Entonces, pues tampoco no en ese rato no se me iluminó despedirme de ella. Y pues pasé, pero como te digo, yo pensé que yo iba a entrar, pero iba a salir nuevamente y no, ya no salí.
Elda: Pero lo bueno es que abrió sus ojos y pudo darle la bendición aquí a vivo y a todo color. Dios la sacó adelante.
Blanca: Sí.
Elda: Sí, sí. Que precioso.
Blanca: Me empezaron a preparar. Me presentaron con el el cirujano que me iba a operar con el el que duerme este y con varias personas ahí, verdad? Y pues [00:20:00] ya de ahí ya. Ya de ya me sacaron para para el quirófano. Y ahí empezaron a, pues también a a platicarme este y hacerme preguntas de cómo me sentía y todo ya como entrando en confianza también para allá, de repente, pum, ya mi vida. Pero yo, como quiera yo, mis pensamientos siempre estuvieron con mi con mis hijos. Yo se los entregué a Dios. Dije señor. Yo me entrego, estoy en tus manos y tú sabes lo que vaya a pasar aquí. Si no pasa, si llega a pasar algo, yo te dejo a mis hijos.
Elda: Y salió de la cirugía. Salió todo bien.
Blanca: Gloria a Dios.
Elda: Y como este, yo puedo ver eso como el final del tratamiento. Obviamente sigue, verdad? Hay síntomas y todo, pero me imagino que hubo como un suspiro. Me [00:21:00] imagino con la familia cuando ya terminó este proceso.
Blanca: Y cuando yo desperté, dije ay, señor, estoy bien, estoy viva. Okey, ya se arrimaron ahí conmigo. Los doctores y todo me preguntaron cómo estaba? Cómo me sentía? No le dije bien, estoy bien. Se le ofrece algo. Oh si. Yo quería haberle dicho que pos tenía hambre, verdad? Pero le dije no sabe que quiero ver a mis hijas.
Elda: Que bueno, sí.
Blanca: Quiero verlas. Okey, ahorita, ahorita se las traigo. Me dijo y sí puede regresaron a mis hijas. Y ya pues, todos felices contentos porque estaba bien, me da porque ya de ahí, pues ya me pasaron a ya muy, muy tarde, verdad? A piso me pasaron a piso ya. No se [00:22:00] pudo quedar mi hija y conmigo nadie porque no permitía me da por el COVID que habían dado muy fuerte. Y pues ya este mija se retiró de allí a las 10 de la noche y ya me quedé ella sola.
Elda: Qué es para usted un mensaje que le le gustaría dejar a su familia después de todo lo que ha pasado? Tal vez. Un mensaje que tal vez no lo pudo decir mientras que estaba pasando por el cáncer y el tratamiento, pero que ahora, con esta audiencia cautiva, verdad, que tiene que le gustaría decir a toda su familia.
Blanca: Pues que se cuiden, que se cuiden mucho, que no vergüenza de de decirlo, verdad de de, que se chequen. Sobre todo la las niñas a mujeres. Este los hombres, también tengo entendido, que también los hombres [00:23:00] padecen también esas cosas bea. Entonces también a mi hijo les digo yo okey, que se cheque, que le diga los niños de él que también haga lo mismo, que no lo dejen a laidi a cualquier cosita inmediatamente. Se chenqueen..
Elda: Qué interesante. Porque al principio del episodio, estábamos hablando de como. Era muy difícil para que usted lo dijera, pero ya después de haber pasado todo lo que pasó, me imagino que se pone usted en los zapatos de sus hijos, de sus hijas, de sus nietos bisnietos y dicen no, yo no quiero que pasen por eso.
Y precisamente por eso tenemos esto, queremos educar a los demás. Ya le pregunté qué es lo que usted le diría a su familia? platíqueme qué le diría a la mujer? A la cultura habla hispana de que miren, miran esto como tabú, aún con el, como se llama este este podcast, hablemos de nuestros senos, [00:24:00] como que ofende a la gente a es verdad, porque es algo muy fuerte, pero habiendo usted atravesado por lo que a usted ha atravesado, qué le diría a usted, a la mujer o el hombre hispano acerca de esos tabú?
Blanca: Pues que también que se cuiden, que se chequen. No tengan vergüenza de nada que busquen este personas que los orienten, que los guen adonde dirigirse, que los orienten, a qué partes pueden asistir para que les den una orientación de todo esto, verdad? Porque si es muy difícil ver a la familia sufrir por uno que está pasando por por todo eso, es muy doloroso. Y yo en realidad no se lo deseo a nadie.
Elda: Qué le diría a alguien que dijera no, yo no voy al doctor. Porque si voy al doctor, voy a encontrar algo. Yo no le puedo decir cuántas veces escuchado a mi gente, a veces decir no, yo no [00:25:00] voy al doctor porque si wey me van a encontrar algo que le diría a esa persona?
Blanca: Que se olvide de eso, que vaya, que vaya que que. Que no se cierre a eso y que bus que busquen dónde, dónde?
Elda: Si, porque tiene que uno que pensar. O sea, yo me imagino usted viendo su bisnieto mirándole a usted diciéndole por favor, no se muera. Yo la yo la quiero. Hagámoslo por nuestra familia.
Blanca: Exacto. Así es. Así es, lógicamente, porque como te digo, uno uno, pues sufre tanto el enfermo como a la persona que tienes a tu lado. Todas. Sí, todas ves tú que entran a verte. Y pues ves el semblante, yo las veía entrar. Y aunque no me sintiera bien, yo sonreía porque para no verlas sufrir.
Elda: Y usted no tenía cáncer, historia de cáncer en su bueno [00:26:00] historia de cáncer de mama en su familia. Nada de eso.
Blanca: No de si tenía mi mamá murió, pero de cáncer en, en este los ovarios y todo esa parte, pero pero de mama, nadie que yo sepa no.
Elda: Y y hay una una con, un entendimiento incorrecto que al decir, si no corre en mi familia, no me va a suceder. Pero el más del 80 porciento de las mujeres que diagnosticamos aquí no tienen historia de cáncer de mamá en su familia.
Entonces es muy necesario seguir educado a las mujeres exactamente. Y también ustedes de 70 años diagnosticada. Hay muchas mujeres que ya después de los 50 y 60 años ya dicen ya no tengo que seguir, pero es importante seguir con esos chequeos con esos chequeos viniendo. Estamos aquí en The Rose. Hacemos eso si no tienen aseguranza, les ayudamos. Es muy importante.
Blanca: Es lo que te digo, verdad? Que buscando quién los oriente, quién los guía hacia la parte [00:27:00] indicada donde te van a ayudar donde te van a dar la mano? Sí, para que uno pueda seguir adelante y encontrar el camino donde te van a dar la atención necesaria.
Elda: Vivimos en un país donde hay esos ayudas. Entonces hay que tomar—
Blanca: exactamente nomás que desgraciadamente, a veces no tenemos conocimiento de todo eso.
Elda: Sí.
Blanca: Sí. Y pues dejamos pasar las cosas.
Elda: Pero no hay que dejarlo pasar.
Blanca: Exacto.
Elda: Y que bueno que usted no lo dejo pasar. Que habló, dio vos, habló con sus hijas, sus hijas encontraron el lugar y ahora está aquí con nosotros. Mire, y que pasó todo lo que pasó a aunque pasó por momentos de que no quería ni ver el siguiente día, aquí está.
Blanca: Así es.
Elda: Quién es blanca ahora, después de su jornada, después de todo este tratamiento, después de todo lo que le encontraron, y que lo que pasó que usted tal vez no pensaba que iba a pasar por cirugía quimoterapia a esta edad. Quién es blanca ahora? [00:28:00]
Blanca: Pues la persona que hace tiempo fui, verdad? Y quiero seguir siéndolo. Yo quisiera, yo quiero ser útil ayudar a mis hijas en sus quehaceres, porque pues ellas dos trabajan. Yo me quedo en casa con uno de mis nietos. A veces él también se va a besar a trabajar como ahorita mi criatura pues se va a ir a trabajar a las dos a la una de la tarde. Ya me quedo yo a mi me gusta barrer trapear, sacudir, hacerles de comer.
Elda: Y hasta de nuevo.
Blanca: Así exactamente. Ya empecé a hacerlo. Aunque a veces si voy me siento pa, que te voy a mentir porque a ver si ya me siento, me canso. Sí, me canso, verdad? Y ay, ya estoy haciendo a la sopa o poniendo frijoles o algo y ya los dejo ahí y ya voy y me siento, ay, señor, dame fuerzas.
Elda: Pero poco a poco.
Blanca: Exacto. Poco a poco, ya. Se me pasa un poco alcanzada. Si me vuelvo a [00:29:00] levantar y ya vuelvo a seguir haciendo lo que estaba haciendo. Y así me la llevo un ratitos ratito descanso. Porque pues, como te digo, apenas fue en mayo, ese día toda me pusieron otro otro tratamiento. Me pusieron verdad? Y pues, todavía yo le digo a mi nieta. Ay, yo. Me desespero. A veces, Abue, tienes muy poquito. Todavía tienes mucho medicamento en tu cuerpo. Todavía tienes que sentir lo que ves, lo que sientes, cansancio, mareo, dolor de cabeza, muchas cosas todavía te van a pasar porque pero poco a poco, porque tienes todavía mucho medicamento en tu cuerpo, tú quieres ya andar pa allá y pa acá no se puede. No se puede todavía.
Elda: Hay que tomar también pausa para descansar, tomar cuenta de la vida que está a su alrededor para ya terminar en esta tarde. Este para ya terminar hoy, quisiera hacerle la pregunta [00:30:00] del millón, del millón a. Bueno, no sé si es el de millón, pero si me gustaría saber una cosa que me gusta preguntarle a los las las personas que iba, entrevisto. Qué tan importante fue para usted compartir su historia ahorita el día de hoy?
Blanca: Oh, pues, muy importante, y espero que muchas de las personas que me estén escuchando, que aunque sean mayores de edad como yo, no lo dejen a decidio. Verdad? Pónganse manos de Dios primeramente. Y Dios va a ser la obra en uno. Y vamos a seguir viviendo y vamos a seguir adelante con nuestra familia, gozando el cariño de nuestros hijos, de nuestros nietos y gloria a Dios. Pero yo ya vi el primer nieto que espero ver otro ma de perdido antes de que Dios me llame. Quiero ver—
Elda: Le está diciendo algo a alguien.
Blanca: Bueno, lo que me escuche, no, pero ella yo son nietos. Ni nietos y hacer los ni [00:31:00] nietos, verdad? Pero bueno, que sea lo que Dios quiera. Sí, este si Dios me permite unos años más gozar de mi familia, de mis hijos, de toda la gente que me me ha apoyado muchísimo. Sí. Y este amigos que me han ayudado muchísimo, que han estuvieron haciendo oración por mí y que aún lo siguen haciendo y que aún siguen estando chivo estando presente en ellos, verdad? Que Dios los bendiga y que Dios, los premios les multiplique todo, todo lo que han hecho por mí.
Elda: Ay. Me da tanto gusto que usted pudo agradecerle a todos los que le han ayudado. Exacto.
Blanca: Así es como no estuve sola en todo de proceso y más a Dios todopoderoso y a nuestra madre. Y aunque ustedes no me lo crean, [00:32:00] cuando yo estuve en el quirófano, ellos estuvieron conmigo en un lado. Estaba la virgen de guadalupe en otro lado, estaba su hijo. Dios padre. Tal vez no me lo crean, pero yo los vi. Yo lo sentí. Y ahí yo ya no supe de mí.
Elda: Su fe. Su fe la mantuvo. Y eso. Yo creo que es el mensaje más importante el día de hoy. Muchas gracias blanca por su entrevista por sus historias. Yo sé que va educar a las mujeres, animar, inspirar, verdad y recordarle a todos que es importante que se cuidan. Que siempre seamos personas que estamos cuidándonos a nosotros para poder cuidar a los demás. Muchas gracias por su.
Blanca: No. Al contrario, muchas gracias a todos ustedes que se han tomado su tiempo para escucharme. [00:33:00] Sí, y gracias a todos, a todos en esta clínica que me ayudaron muchísimo. Allá en la en la otra clínica en el hospital donde me operaron a todos. Gracias y que Dios lo siga bendiciendo y les dé mucha fuerza, mucha sabiduría para poder seguir atendiendo a tanta gente que tal vez esté pasando en este memento por todo lo que yo he pasado.
Elda: Muchas gracias blanca. Así quedamos en este podcast. Te hablemos de nuestro senos. Muchas gracias. Y hasta la próxima.
